Un guerrero de la luz siempre tiene una segunda oportunidad en la vida.
Como todos los demás hombres y mujeres, él no nació sabiendo manejar su espada, y cometió muchas equivocaciones antes de descubrir su Leyenda Personal.
Ningún guerrero puede sentarse en torno a la hoguera y decir a los otros: “Siempre actué correctamente”.
Quien afirma esto está mintiendo, y aún no aprendió a conocerse a sí mismo. El verdadero guerrero de la luz ya cometió injusticias en el pasado.
Pero en el transcurso de la jornada, percibe que las personas con quienes actuó injustamente siempre se vuelven a cruzar en su camino.
Es su oportunidad de corregir el mal que les causó. Y él siempre la utiliza, sin vacilar.
Paulo Coelho
martes, 6 de julio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario